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Esencialmente humano

Valorarse

Valorarse


   El joven se acercó al maestro en búsqueda de
   un poco de sosiego:

   - Maestro, -le dijo al viejo- me siento inseguro,
   nada me resulta como yo quiero. Todos me dicen
   que soy un tonto y que no sirvo para nada.
   Sólo me critican, sin valorar lo que hago.
   ¿Me podrías ayudar?

   - Ahora no me es posible muchacho -respondió
   el anciano-. Tengo mis propios problemas. Más
   bien ayúdame tú a mí a vender este anillo.

   El muchacho recibió la sortija de mala gana
   pensando que una vez más sus necesidades pasarían
   a un segundo plano.

   - Escucha, -dijo de nuevo el anciano-  ve al
   mercado y ofrécelo, pero de ninguna manera lo
   vendas por menos de una moneda de oro.

   El joven ofreció el anillo a muchas personas.

   La mayoría lo desdeñaba con desprecio, unos
   pocos se reían y escasamente alguno llegaba a
   mostrar interés.

   Alguien le propuso venderlo por dos monedas
   de plata y un candelabro de bronce, lo cual
   representaba menos de la mitad de lo que el
   maestro quería.

   El muchacho llegó a la conclusión que el
   viejo estaba loco, y que esa gran suma que
   pedía únicamente podría ser el resultado de
   un alto valor emocional.

   Dejando de lado esos razonamientos, el
   joven persistió haciendo lo mejor para ayudar
   al anciano, no obstante la tarea le parecía
   cada vez más difícil.

   Desanimado, decidió regresar y contarle al
   viejo lo acontecido:

   - Hice lo posible, pero aun los que parecían
   ser los más expertos no ofrecían una cantidad
   ni siquiera cercana a la que tú pides -contó
   el joven-.

   - Tal vez tienes razón. Quizás no conozco
   su verdadero valor  -replicó el maestro-. ¿Por
   qué no lo llevas donde el joyero y se lo muestras?
   No lo vendas por ninguna cantidad, sólo cuéntame
   lo que opina.

   Renegando por la terquedad del anciano, el
   joven llevó la alaja al joyero.

   Después de observarla detenidamente un rato,
   éste le dijo:

   - Ésta es una verdadera joya. Dile al maestro
   que le doy 58 monedas de oro, en realidad puede
   costar hasta setenta, pero, si tiene prisa, ésa
   es mi oferta.

   Cuando el muchacho, entusiasmado, le contó al
   viejo, éste tranquilamente respondió:

   - Tú eres como una joya valiosa: Si te sientes
   mal no es porque los demás no te valoren, sino
   porque tú mismo no te valoras lo suficiente.

   Amigo,  cree en tu valor y en el de lo
   que haces. Quienes no se percatan de lo que vales
   lo hacen por ignorancia.

   Si actúas sólo por buscar la aprobación de los
   demás te sentirás frustrado y vacío. Cree en ti y
   así encontrarás tu propia joya.

Arroz

Arroz

Remedios para la salud (AWHW)

NO COMA MUCHO ARROZ:

El cuerpo humano nunca tuvo la intención de consumir el arroz Usted ve, nuestros genes no han cambiado en más de 30.000 años. Sin embargo, nuestra elección de alimentos y estilo de vida han cambiado dramáticamente. El hombre de las cavernas difícilmente reconocería nuestros alimentos o forma de vida.

Los alimentos cocinados nunca fueron del hombre de las cavernas y nunca domesticó el fuego.  Por lo tanto, sólo comía los alimentos que puede digerir sin necesidad de ser tratados o puesto al fuego. Comía frutas, verduras, pescado, huevos, nueces y carne. Sí, incluso carne. Usted puede incluso comer la carne cruda si se muere de hambre en el bosque. Usted tiene las enzimas necesarias para digerir la carne.

Sin embargo, el arroz - como el trigo y el maíz -, no se puede comer crudo. Debe ser cocinado. Incluso si usted se muere de hambre en el desierto, no se puede comer el arroz en forma cruda. Esto es porque no tenemos el sistema de enzimas para romper el arroz. Nunca fuimos hechos para comer arroz. Para empeorar las cosas, no sólo comemos arroz, sino está también en la mayor parte de lo que comemos a diarios.

En algunas partes de Asia, el arroz forma hasta un 85% del plato. Si comemos  arroz, vamos a limitar al mínimo posible. Recuerde que no es sólo para nuestra lengua... para nuestro cuerpo. En realidad, el arroz y otros granos como el trigo y el maíz son en realidad peor que el azúcar.

Hay muchas razones:

El arroz se convierte en azúcar – en un alto porcentaje

Este es un hecho que no pueden negar los nutricionista: el arroz es químicamente igual al azúcar. Una taza de arroz cocido tiene un equivalente calórico de 10 cucharaditas de azúcar. Esto no importa si el arroz es arroz blanco, café o de hierbas. El arroz integral es rico en fibra, vitaminas del complejo B  y minerales... pero sigue teniendo el aporte calórico equivalente a 10 cucharaditas de azúcar.

El arroz al ser digerido se convierte en azúcar.

El arroz puede ser digerido sólo cuando está bien cocido. Y cuando está bien cocido, se convierte en azúcar y los picos de azúcar en la sangre circulan en solo media hora... casi tan rápidamente como si nos hubiéramos comido un dulce. El arroz es muy bajo de anti-oxidantes. Estos son necesarios para la eficaz y  segura utilización del azúcar. Las frutas vienen con un azúcar llamado fructosa. Sin embargo, no son calorías vacías  la fruta está repleta de una gran cantidad de otros nutrientes que ayudan a su correcta asimilación y la digestión.

El arroz no tiene fibra.

Dado que el arroz blanco no tiene fibra, terminamos comiendo un montón de "calorías pesadas”. El arroz integral tiene más fibra pero todavía contiene la misma cantidad de azúcar.

El arroz es no tiene sabor.

El azúcar es dulce. No es mucho el azúcar que podemos comer en una sentada. ¿Cuántas cucharadas de azúcar podemos comer antes de sentir ganas de vomitar? ¿Se imagina comer 10 cucharaditas de azúcar en una sentada?

El arroz es siempre la parte principal de la comida.

Mientras que el azúcar puede llenar nuestro postre o endulzar el café, que nunca será la parte principal de cualquier comida. Podíamos comer tal vez dos o tres cucharaditas de azúcar en una comida. Sin embargo con el arroz, podríamos comer el mismo valor de dos a tres tazas (20 - 30 cucharaditas) de azúcar en una sola comida. Siempre me divierte cuando veo a alguien comer a veces, cinco tazones de arroz (equivale a 50 cucharaditas de azúcar) y luego pedir para el té o café sin azúcar

No hay  "un programa en nuestro cuerpo, un  mecanismo para que podamos evitar el exceso de consumo de arroz. ¿Qué cantidad de pollo frito? ¿Cuánto pescado al vapor? Piense en eso En una sentada, nos podemos tomar un montón de pollo, pescado o pepino, pero podemos tomar un montón de arroz. Comer arroz nos lleva a comer más sal.

Puesto que el arroz no tiene sabor, nos lleva a consumir más sal... otro villano cuando se trata de control de la presión arterial alta. Tenemos la tendencia a tomar más curry que tiene sabor a sal para ayudar al arroz. También tienden a consumir más salsa de tomate y salsa de soja, que también son ricos en sal.

Comer arroz nos hace beber menos agua.

Si más arroz comemos, menos agua vamos a beber, como no existe un mecanismo para evitar  el exceso de arroz. El arroz, el trigo y el maíz vienen escondidos en nuestra alimentación cotidiana. Puesto que el arroz no tiene sabor, tiende a terminar en otros alimentos que sirven como sustitutos del arroz. .. como la harina de arroz, fideos y pan. Tenemos la tendencia a comer las formas ocultas de arroz que todavía se digieren y convierten en azúcar. El arroz, incluso cuando se cocina, es difícil de digerir.

No se puede comer arroz crudo? Trate de comer arroz medio cocido. Contrariamente a la creencia popular, el arroz es muy difícil de digerir. Se trata de "materia pesada". Si usted tiene problemas con la digestión, intente dejar el arroz durante unos días. Usted se sorprenderá de cómo el problema va a desaparecer solo.

El arroz evita la absorción de varias vitaminas y minerales. El arroz, cuando se toma en grandes cantidades reduce la absorción de los nutrientes vitales como zinc, hierro y las vitaminas del grupo B.

¿Es usted un adicto al arroz?

Ir a no arroz no será fácil, pero aún puedes ir a menos arroz. Comer arroz podría ser mucho más fácil de lo que pensamos. He aquí algunas estrategias que podemos seguir en nuestra búsqueda para comer menos arroz:

1. Coma menos arroz - Cortar el arroz a la mitad. Barry Sears, autor de la “dieta de zona”, aconseja "comer arroz como condimento". En su lugar, aumentar la ingesta de las frutas y verduras.

2. Tome las carnes más magras y pescado.

3. Usted puede incluso tomar más huevos y nueces. Tener un menú “menos arroz”. No realizar ningún arroz o trigo en el desayuno. Ir a los huevos en su lugar.

4. Usar el menú "menos arroz" unos días – Volver a la "occidental" una vez por semana. No tomes arroz y pan de un día a la semana Eso no suena demasiado difícil. Apreciar la riqueza de su comida. Sentir el gusto, colores y olores. Haga que el comer una delicia culinaria. Disfruta de la comida en los sabores originales.

5. Evite el salero o salsa de tomate. Automáticamente va a comer menos arroz.

6. Coma su postre de frutas antes de las comidas. Las frutas ricas en fibra "crecen o se infla " en el estómago. Por lo tanto, usted va a comer menos arroz y más frutas.

El AGUA Después de cada comida

Para aquellos que les gusta beber agua fría, este artículo es aplicable a usted. Se dice que es bueno tener una taza de bebida fría después de una comida. Sin embargo, el agua fría solidifica el alimento grasoso que usted acaba de ingerir.

Esto hace más lenta la digestión. Una vez que esta ’bola’ reacciona con el ácido digestivo, se descompone y es absorbido por el intestino más rápido que la comida sólida. Se alineará con el intestino Muy pronto, esto se volverá en grasa y nos llevara al cáncer.

Es mejor tomar una sopa caliente o agua tibia después de una comida.

Aliwale Hussainwale

para conectarse con Shia Mundial

healthremedies.awhw @ gmail.com

PONERTE AL DIA

Es más fácil estar al día que ponerte al día
por Dr. Alan Zimmerman
                                             Súper Visión


Con los años he aprendido que hay leyes indiscutibles de la naturaleza... tales como las de la gravedad y el movimiento. Si saltas de un edificio, vas a caerte, no importa cuán buena sea tu actitud. Y si estás en movimiento, es probable que sigas en movimiento.

Pero también he aprendido que hay un conjunto de leyes incuestionables para tener éxito. Si las conoces, si las sigues, te va a ir muy bien. En este artículo voy a tratar tres de ellas.

1. La Ley de Educación Continua
Es un hecho simple. Si tus competidores siguen aprendiendo y tú no, ¿piensa quién tendrá la sartén por el mango cuando ambos se conozcan? No serás tú. Y a pesar de este simple hecho, la mayoría de la gente es intelectualmente perezosa y sorprendentemente sedentaria en adquirir nuevos conocimientos e información. Ingenuamente piensan que ya lo saben todo... o al menos lo suficiente para sobrevivir. Si tú estás en esa categoría, te tengo un consejo: "Si piensas que lo sabes todo, probablemente sabes menos de lo que crees".

Otras personas jactanciosamente me dicen que prefieren aprender mediante la experiencia.

¡Claro que puedes aprender de la experiencia, pero el costo termina por ser muy alto. Como expuso Vernon Law: "La experiencia es una maestra severa porque primero te hace la prueba y te da la lección después". Personalmente, me suscribo al consejo de la Dra. Beatrice de Berry. Ella dice: "Es más importante saber que ser bien conocido". Así que leo docenas de libros y boletines informativos cada año, escucho cientos de CD’s educativos y motivacionales cuando viajo, y asisto a por lo menos 10 días de capacitación cada año. Este criterio ha producido maravillas en mi vida.

Así que te sugiero que aproveches todas las oportunidades de formación que puedas. Y cuando estés a punto de asistir a un programa de entrenamiento, asegúrate de sacarle el mayor provecho haciendo algo de lo siguiente:

    Prepárate con antelación
    Enumera al menos cinco preguntas específicas que quieres que te respondan en el programa.

    Utiliza el tiempo de descanso para relacionarte
    Habla con tus colegas. Averigua cuáles han sido las cosas más importantes que han aprendido en el seminario. Y haz planes para comer con tantas personas como te sea posible.

    Recoge un folleto de todos los ponentes
    Incluso respecto a las sesiones a las que no pudiste asistir. Estás obligado a aprender una o dos cosas que nunca hubieras aprendido de otra manera.

    Lee tus notas
    Revísalas camino a casa, y prepara un resumen de lo que experimentaste y lo que aprendiste.

    De vuelta al trabajo conduce un mini-seminario
    Dile a tus compañeros de trabajo lo que aprendiste.

    Manténte en contacto con los instructores
    Escríbeles... hazles preguntas adicionales. Y pregúntales dónde puedes conseguir más información si lo necesitas.

Una vez que hayas puesto en marcha la Ley de Educación Continua, necesitas seguir con...

2. La Ley de Aplicación Intencional
En otras palabras, no es suficiente continuar aprendiendo. Debes tener la intención de aplicar lo que aprendiste. Después de todo, no hay nada más patético que una persona bien informada y educada que se queda sentada en su trasero, negándose a utilizar los conocimientos que ha adquirido.

Si vas a tener este enfoque, también podrías ahorrarte el aprendizaje. Como dice el consultor espiritual Swami Sukhabodhananda: "Saber es el primer paso hacia la transformación. Saber y no actuar es igual a no saber".

Necesitas entusiasmarte con las cosas que aprendes. Después de todo, "El conocimiento es poder, pero el entusiasmo estimula el cambio". Cuando te emocionas con las cosas que aprendes, cuando planeas usar tus aprendizajes, cierras lo que el autor Jackson Brown llama "la brecha más grande en el mundo". La brecha más grande en el mundo es entre el "yo debería y ya lo hice".

Cuando apliques la Ley de Educación Continua y la Ley de Aplicación Intencional, entonces necesitas practicar...

3. La Ley de Acción
Has escuchado decir que "el conocimiento es poder". Pero me permito disentir. El conocimiento no es poder, sino la aplicación del conocimiento.

Goethe habló de esto hace siglos: "El conocimiento no es suficiente, debemos aplicarlo. La voluntad no es suficiente, debemos hacer". La Ley de Acción dice que tienes que hacer algo con lo que has aprendido.

La consultora Chris Clarke afirma que: "La experiencia no es sobre el saber, sino sobre lo que haces con lo que sabes". Ella tiene razón. Así que te recomiendo tres formas de aplicar la Ley de Acción en tu vida...

    Sólo hazlo... si sabes que es lo correcto
    No esperes a que se reúnan un conjunto perfecto de condiciones antes de hacer algo. "Lo perfecto" nunca ocurre o no llega jamás. Muchas grandes ideas se quedan en el camino porque la gente espera lo "perfecto".

    Sólo hazlo... no importa la edad que tengas
    No hay edad o tiempo en la vida, ninguna posición o circunstancia que tenga el monopolio del éxito. ¡Cualquier edad es adecuada para empezar a actuar!

    Sólo hazlo... sin estancarte en el pasado o el futuro
    Como el psicólogo Abraham Maslow descubrió: "Puedo sentirme culpable por el pasado, tener aprensiones sobre el futuro, pero sólo en el presente puedo actuar. La capacidad de estar en el momento presente es un componente importante para el bienestar mental".

Utiliza estas tres leyes y estarás bien.

Acción:
¿Cuáles son las 3 cosas que has aprendido en el último mes? ¿Y cuáles son tus planes para hacer algo con esos aprendizajes

TU TIEMPO

¿Por qué es importante administrar tu tiempo?
por Stephanie Marston

                                 Inicie una Nueva Vida


El propósito de gestionar el tiempo es hacer más cosas en menos tiempo. Esto te permitirá dedicarle más tiempo presencial a las personas que te importan, haciendo cosas que le den mayor cantidad de alegría y satisfacción a tu vida.

La mayor parte de tu felicidad es producto de las relaciones satisfactorias, especialmente con las personas más cercanas a ti. El factor determinante de la calidad de tus relaciones es la cantidad de tiempo que compartes con las personas que amas y te aman.

Puedes tener control sobre tu tiempo si dejas de hacer cosas de poco valor y le dedicas más tiempo a las pocas actividades que realmente pueden hacer una diferencia en tu vida.

Si eres como la mayoría de las personas, estás abrumada con demasiadas cosas que hacer y muy poco tiempo disponible. A medida que haces un esfuerzo por mantenerte al día, se te acumulan nuevas responsabilidades. La realidad es que nunca serás capaz de hacer todo lo que tienes que hacer. Nunca habrá un momento en el que hayas terminado. Siempre habrá más por hacer que lo que tú puedes hacer en el transcurso del día.

Sé selectiva
Es esencial que seas capaz de seleccionar la tarea más importante en cada momento, y que logres hacerla de manera eficiente y bien. Ser selectiva tendrá más impacto en tus logros que cualquier otra habilidad o cualidad que puedas desarrollar.

Las personas que desarrollan la habilidad de establecer prioridades claras y resuelven por completo las tareas importantes, sobresalen ante las personas que hablan mucho, hacen grandes planes, pero concretan poco.

La regla es que si tienes dos tareas importantes a resolver, empieza con la que sea más difícil primero. Disciplínate a concentrarte en ella hasta que concluyas esa tarea antes de ir a otra cosa.

Considera esto un desafío. Resiste la tentación de empezar con la tarea más fácil. Recuerda que una de las decisiones más importantes de cada día es lo que harás de inmediato y lo que harás más tarde (si te alcanza el tiempo).

La clave para alcanzar un alto nivel de rendimiento y productividad es desarrollar el hábito de resolver primero la tarea más importante del día.

Actúa de inmediato
Las personas exitosas son aquellas que se centran directamente en sus tareas principales y se disciplinan para trabajar de manera constante y concentrada hasta que esas tareas se hayan terminado.

En el trabajo se te paga y eres promovida por obtener resultados concretos y medibles. Te pagan por hacer una contribución valiosa y, sobre todo, por hacer la contribución que se espera de ti.

No tomar medidas eficaces es uno de los mayores problemas en las organizaciones. Muchos empleados confunden actividad con logro. Continuamente hablan, celebran reuniones sin fin, y hacen planes fantásticos, pero en el análisis final, nadie hace el trabajo y obtiene los resultados requeridos.

¡Hazlo ya!
Una de las maneras más sencillas y eficaces para ser más productivo es repetirte a ti misma "¡Hazlo ya! ¡Hazlo ya! ¡Hazlo ya!", una y otra vez.

Si encuentras que te dejas distraer por socializar o realizar actividades de bajo valor, dite a ti misma, "¡Vuelve a tu trabajo!" En otras palabras, trabaja cuando trabajas. No pierdas el tiempo. Cada minuto que pasas navegando por la web o en conversaciones intrascendentes con un compañero de trabajo, le estás quitando tiempo al trabajo que debes cumplir y, en consecuencia, tiempo alejada de tu familia y tus relaciones importantes.

Nada te ayudará más en tu carrera que tener la reputación de ser la clase de persona que resuelve un trabajo importante de manera rápida y eficaz. Esta reputación le hará una de las más valiosas y respetadas en tu campo.



Mirarnos En El Otro

Por Enriqueta Olivari www.sanatualma.com

En verdad todos somos espejos unos de los otros. Para alcanzar esta percepción, hay que tener en cuenta que no existe una línea divisoria entre “afuera” y “adentro”, sino que todo está unido, y lo que nos sucede es un reflejo de nuestra realidad interna. Por eso si tú cambias, todo cambia en tu mundo, literalmente. El más claro espejo de lo que sentimos, pensamos y hacemos podemos encontrarlo en las personas que nos rodean. Cada una de ellas refleja un aspecto de nosotros mismos, aunque es necesaria la honestidad con uno mismo para reconocerlo. Aquello que admiras en los demás, lo reconoces y aprecias porque tú también lo llevas dentro. Puedes hacer la prueba: fíjate en una persona que te encanta, y descubre qué características te atraen en ella. Luego deja de lado todo lo que te han dicho acerca de cómo eres o cómo deberías ser, y observa: ¿puedes ver esos talentos y cualidades dentro de ti? Si pones a un lado tus juicios y críticas y te aceptas a ti mismo, verás que es así, aunque quizás esas cualidades estén latentes, esperando a que las reconozcas para entonces desarrollarlas. De este modo, esa persona quizás sea un espejo de tu futuro. Lo mismo sucede con aquellas personas que nos producen un fuerte rechazo. Si eres honesto contigo mismo y apartas lo que piensas que es admisible o censurable, verás que aquello que no te gusta de alguien es una característica tuya que juzgas y no aceptas. El camino entonces es aceptar aquello que juzgabas, amarte a ti mismo también con aquello. ¡Y muchas veces reírse de uno mismo opera verdaderas maravillas! Entonces el otro ya no te fastidia, simplemente ha hecho el papel de espejo, y puedes sentirte agradecido por la ayuda que, sin proponérselo, te ha brindado. Sin embargo esto tiene muchos matices. Si eres una persona amorosa y llevas la armonía a todas las situaciones de tu vida, por ejemplo, y de repente aparece en tu realidad una persona conflictiva, quizás esa persona esté reflejando sólo una parte de ti que pertenece al pasado, y que ya no corresponde con quien eres ahora. En ese caso, quizás la lección sea poner límites, o por amor a ti mismo alejarte de ella, con perdón y desapego. Otra posibilidad es elegir conscientemente que ella no te afecte, y enviarle tu Amor y comprensión, pues es probable que esa persona actúe así por no amarse a sí misma lo suficiente. Entonces también puedes sentir gratitud, pues el otro te está dando la oportunidad de ser aún más amoroso y compasivo. De este modo vamos descubriendo que en realidad “el otro” no existe. Sólo existe la Unidad, y cada persona es una parte de nosotros mismos que anhela el Amor, la paz, la armonía y retornar a la Unidad olvidada o perdida.

Amor en la paternidad

Amor en la paternidad

Cuando los investigadores estudiaron el cerebro de los niños huérfanos rumanos - que habían sido dejados llorando en su cuna desde su nacimiento y se les niega cualquier posibilidad de formar vínculos estrechos con un adulto - se encontraron con un "agujero negro virtual," donde debería haber estado la corteza orbitofrontal . Esta es la parte del cerebro que nos permite manejar nuestras emociones, de relacionarnos con sensibilidad a otras personas, de experimentar placer y apreciar la belleza. Estas primeras experiencias de los niños había disminuido en gran medida su capacidad alguna vez de ser plenamente humano
Fue Margaret Ainsworth, un psicólogo canadiense, que demostró por primera vez una conexión robusta entre la experiencia de la primera infancia y la personalidad
Ainsworth se sentó detrás de un espejo de dos vías en Baltimore, y vio a niños de un año de edad jugando con sus madres. Señaló lo que ocurrió cuando la madre salió de la habitación por unos minutos y como el niño respondió a su regreso. A continuación tomó el estudio un paso más allá y observo lo que sucedió cuando, en lugar de la madre, un desconocido entró en la habitación y trató de relacionarse con el niño.
El estudio "Situación Extraña" de Ainsworth , junto con la teoría del apego de John Bowlby, demostró que la forma en un niño se ha desarrollado no fue el resultado de una general mezcolanza de experiencias, pero si el resultado directo de la forma como el padre o responsable del niño respondió a las exigencias y participó con él o ella. Padres negligentes, estresados o inconsistentes dieron el tipo de atención que tiende a dar lugar a niños ansiosos, inseguros o evasivos. Otros estudios demostraron que los patrones de conducta de apego en niños de un año de edad pueden predecir con precisión cómo los niños se comportaran de entre cinco y ocho

La confusión reina sobre la conexión entre la experiencia temprana y la personalidad. Los padres son culpados cuando las cosas van mal, el resto del tiempo, su papel es minimizado.
Gerhardt, un psicoterapeuta, valientemente ha ido a donde muchos la mayor parte en los últimos años no se atrevían a pisar. Ella toma el lenguaje duro de la neurociencia y la utiliza para probar la parte blanda de la teoría del apego. Recoger a su bebé que llora o ignorar puede ser una cuestión de elección de los padres, pero los efectos serán grabados en el cerebro de su bebé en los próximos años. Poner a su niño de un año de edad en una guardería o dejarlos con una niñera puede llegar a ser una decisión más trascendental de lo que pensaba.
Sobre la base de los hallazgos más recientes del campo de la neuroquímica, Gerhardt hace una impresionante declaración que las experiencias emocionales en la infancia y los primeros años tiene un efecto mensurable sobre cómo nos desarrollamos como seres humanos, explica cómo todos los días las interacciones entre un niño y su padre o responsable tienen un impacto directo sobre la forma en que el cerebro se desarrolla.
Gerhardt no estaba interesado en las habilidades cognitivas - la rapidez con que un niño aprende a leer, escribir, contar hasta 10. Ella está interesada en la conexión entre el tipo de amor que recibimos en la infancia y la clase de personas que llegamos a ser. Quiénes somos ni se codifica en el nacimiento, según ella, ni se ve formando poco a poco con los años, pero está inscrito en nuestro cerebro durante los dos primeros años de vida en respuesta directa a la forma en que son amados y cuidados.
Nuestras primeras experiencias no son simplemente establecidas en forma de recuerdos o influencias, se traducen en patrones fisiológicos precisos de respuesta en el cerebro que a continuación, establecen las reglas para manejar neurológicamente con nuestros sentimientos y los de otras personas para el resto de nuestras vidas. No es la naturaleza o la crianza, sino ambos. Cómo nos trataron cuando bebés y niños pequeños determina la forma en que se nace y luego se convierte en lo que somos. De acuerdo con Gerhardt, "No hay nada de automático. El tipo de cerebro que cada bebé desarrolla es el cerebro que sale de sus experiencias particulares con la gente.

El jugador clave en este drama resulta ser una hormona llamada cortisol. Cuando un bebé está molesto, el hipotálamo, situado en la subcorteza en el centro del cerebro, produce cortisol. En cantidades normales de cortisol está muy bien, pero si un bebé está expuesto por mucho tiempo o muy a menudo a situaciones de estrés, (por ejemplo, se deja llorando), su cerebro se inunda con el cortisol, y entonces ya sea excesiva o insuficiente, la producción de cortisol cuando el niño está expuesto al estrés es importante. Demasiado está vinculado a la depresión y el miedo, demasiado poco al desapego emocional y la agresión. Los hijos de alcohólicos tienen un nivel de cortisol elevado, al igual que los hijos de madres muy estresadas.

El punto clave es que los bebés no pueden regular su respuesta al estrés por su cuenta, aprender a hacerlo sólo a través de experiencias repetidas de ser rescatados (atendidos), o no, de su angustia por quienes los rodean o aprecian... A través de una interacción positiva, el bebé aprende que la gente puede ser invocada para responder a sus necesidades, y el cerebro del bebé aprende a producir cantidades favorables de cortisol. Los niveles basales de cortisol son más o menos establecidos a los seis meses de edad.

Los bebés humanos, al igual que todos los mamíferos, nacen programados para la supervivencia, pero de manera única, se aprende a hacerlo a través de otras personas. Al sonreír lindamente mucho antes de que puedan caminar o hablar, los bebés pueden asegurarse de que los adultos en sus vidas están lo suficientemente obsesionado para perdonar las noches de insomnio y quieren mantenerlo con vida. Sonreír a cambio le enseña al bebé los beneficios de la comunicación y ceba el cerebro infantil por más. Ser buenos padres no es sólo bueno para el bebé, sino que conduce a un buen desarrollo de la corteza prefrontal del bebé, que a su vez permite el crecimiento del niño para desarrollar el autocontrol y la empatía, y de sentirse conectado con otros. La interacción con amor, resulta que es el camino del meramente humano a la totalidad humana.
No se hace lo suficiente para ayudar a los padres establecer prioridades y responder a las necesidades de sus hijos en los vitales primeros dos años de sus vidas. Gerhardt sólo toca brevemente el tema de la guardería para los niños muy pequeños, pero esto, también, debe, obviamente, tener mucha más atención.

"El amor es nuestra única garantía de ser esencialmente humanos y plenamente felices. Es la manifestación de la sabiduría plena y vivir en el amor es nuestra única deuda con Dios para honrar su imagen y semejanza". Psic José Goyo

Nunca es demasiado tarde

Nunca es demasiado tarde

“Nunca es demasiado tarde para ser lo que podrías haber sido”  George Eliot
Permíteme hacerte una pregunta:  ¿Estás viviendo tu vida de la manera en que realmente quieres vivirla?  Si tu respuesta es afirmativa, te felicito, porque entonces eres de las pocas personas que son verdaderamente exitosas y que tienen el control completo de su vida.  Pero si no es así, déjame decirte que formas parte de un grupo desafortunadamente muy grande de personas que están viviendo la vida que otros les están dictando.  Y ¿vale la pena vivir así?
Y lo que sucede es que, en lugar de vivir nuestra propia vida, terminamos viviendo la vida que los demás quieren para nosotros, y ¡ni siquiera somos conscientes de ello!  Por miedo a quedarnos solos, buscamos la aprobación de los demás (padres, hijos, esposos, novios, amigos, jefes, compañeros de escuela o de trabajo, maestros, vecinos, etc., etc.), y nos convertimos en una mezcla extraña de todo lo que los demás esperan de nosotros, lo cual está muy lejos de ser la vida que realmente deseamos vivir, nuestra propia vida.
No hay nada de malo en aceptar la opinión o consejos de los demás, si eso significa una mejoría en nuestras vidas.  No se trata de que nos rehusemos a escuchar las opiniones de los demás, porque eso nos estaría cerrando la puerta a la oportunidad de aprender, o de abrirnos a otros puntos de vista que podrían ser muy útiles.  Pero hay que tener cuidado de no caer en la trampa de una situación en la que te conviertes en el esclavo de las intenciones de los demás.  Sin duda, es tu vida y tienes todo el derecho de vivirla a tu manera, sin la influencia de los demás.  Date a ti mismo(a) la oportunidad de desarrollar tus cualidades creativas, libre de miedo y de presión.
La razón por la que no vives tu propia vida, es porque crees que entre mejor la gente se sienta acerca de tí, mejor te sentirás acerca de ti mismo(a), y que entre menos seas aprobado(a) por los demás, más solo(a) e inapropiado(a) te sentirás.  Esto ayuda a explicar por qué piensas que siempre tienes que agradar a los demás, y por qué al mismo tiempo estás resentido(a) con aquellos que sientes que debes agradar.  El tener la aprobación de los demás se ha convertido en un sistema extraño de vida en el que crees inconscientemente que no hay vida sin alguien que apruebe tu existencia.  Y justamente lo contrario es cierto.  Entre más dependes de otros para confirmarte a ti mismo(a), menos vida tienes.

Es nuestro miedo a quedarnos solos y  el querer tener la certeza de que estamos haciendo lo correcto, lo que nos empuja a buscar la aprobación de los demás. Pero el día que dejes de vivir buscando la aprobación de los demás, comenzarás a vivir realmente tu propia vida, libre de culpas y resentimientos.   Nadie a tu alrededor sospechará que ahora vives en una nueva clase de mundo interior, un mundo que siempre es en tus propios términos, porque tus términos y los términos de este nuevo mundo interior feliz nunca estarán en conflicto.  Habrás recuperado tu propia vida.
Esta necesidad de aprobación permea todas las áreas de nuestras vidas, nuestras relaciones en casa y en el trabajo, cómo gastamos nuestro dinero, la manera en que vestimos, la manera en la que nos relacionamos con extraños, hasta los alimentos que comemos y los lugares que frecuentamos.  Esta necesidad de agradar a los demás nos lleva a vivir vidas que en el fondo no nos satisfacen y a permanecer en relaciones que no nos hacen bien.  En casos extremos, esta necesidad de agradar a los demás nos puede causar enfermedades, pobreza y aún la muerte.
Cuando vivimos nuestra vida en base a lo que los demás piensan de nosotros, destruimos nuestro propio ser, nuestra esencia. Si enfocamos nuestra energía en agradar a los demás, no nos queda nada para crear nuestra propia vida.  Si, en nuestro esfuerzo de agradar, permitimos que las ideas de los demás controlen todo lo que hacemos, nuestra vida estará llena de constantes confusiones e insatisfacciones.
Es absolutamente imperativo que cada uno de nosotros aprenda a amarse a si mismo.  Cuando nos amamos, podemos ser sinceros con nosotros mismos y podemos escuchar lo que los otros dicen y decidir objetivamente si tiene algún valor o verdad para nosotros.  Esto libera nuestro propio potencial y nuestra capacidad de mejorar cada área de nuestra vida, de acuerdo a nuestros propios valores.  Por supuesto, el ser objetivo no es fácil, pero puede lograrse.  No debemos permitir que los demás reflejen sus propias inseguridades y miedos en nosotros.

Desde pequeños, aprendemos a vivir nuestra vida pensando que hay ciertas cosas que no debemos hacer porque “¿qué van a pensar los demás?”  También,  aprendemos que debemos agradar a los demás, aún a costa de nosotros mismos.  Esta negación de nuestro verdadero ser es tan fuerte, que nos olvidamos de lo que realmente somos.  Y así pasamos nuestras vidas suprimiendo nuestros propios deseos.  Pero ha llegado el momento de cambiar este patrón.  Cada vez que permites que tu vida sea manejada por los deseos de los demás, renuncias a ti mismo(a).
Recuerda que tú eres responsable de tu propia vida.  Después de todo, ¿quien más puede ser el experto en tu vida?  ¿Quien más puede decir lo que sientes y lo que quieres, lo que te hace feliz y sentirte vivo(a)?  Tú tienes, dentro de ti mismo(a), todas las respuestas, por eso es que debes aprender a hacerte cargo y tomar la responsabilidad completa de tu vida.  No hay otra persona, lugar, sistema, filosofía, iglesia u organización, que sepa más acerca de tí, que tú mismo(a).  Recuerda que tú estás a cargo de tu vida, y que tú puedes ser tu propio mejor amigo.  Tú eres la única autoridad en tu propia vida.  Eso no significa que no ames y apoyes a los demás o que no escuches lo que tengan que decir.  Acepta que puedes aprender de los demás.  Acepta que tienes el poder de crear tu vida exactamente en la manera que tú quieres.
Si has renunciado a lo que realmente quieres por temor a lo que van a pensar los demás, es tiempo de dejar de hacerlo.  Hay una fórmula sencilla que te permitirá vivir cualquier cosa que desees:  “Siempre y cuando aquello que hagas sea ético, siempre y cuando no quieras lastimar o quitarle algo a otra persona, entonces la vida que escojas es buena.”  Determina la vida que elegirías si no hubiera obstáculos.  No te preocupes si suena loco o si significa que tendrás que renunciar a cosas o a personas que están en tu vida ahora.  Sólo ten claridad con respecto a lo que quieres.
“No importa que tan lejos hayas llegado por el camino equivocado, en el momento en que te des cuenta, deténte y toma el camino correcto.”
Es muy probable que actualmente no estés viviendo la vida que tú elegirías.  Y también es muy probable que ni siquiera seas consciente de ello.  Las tradiciones y la presión de la sociedad, la familia y la religión, generalmente juegan un papel muy mportante en determinar cómo vives tu vida.  Mucha gente termina siguiendo el camino conocido de:  escuela, universidad, carrera, trabajo, matrimonio, hijos, jubilación, vejez,  enfermedad y muerte, sin siquiera considerar que hay otras opciones.  Las elecciones que hacemos, normalmente están limitadas por las tradiciones y lo que nos es familiar, y no es fácil rebelarse contra este patrón y forjar un camino propio.
¿Como te sientes hoy con tu vida?  ¿Estás viviendo cada día en plenitud?  ¿Amas lo que estás haciendo?  ¿Estás emocionado(a) cada momento de tu vida?  ¿Estás esperando con ilusión lo que viene después? ¿Estás viviendo tu mejor vida?

Si tu respuesta es:  no, quizás, o no estoy seguro(a), eso significa que no estás viviendo tu vida al máximo.  Lo cual no tiene que ser así, ya que tu experiencia de vida la creas tú.  ¿Por qué conformarte con menos de lo que puedes ser?  ¡Tú mereces nada menos que lo mejor!  ¡Mereces vivir una vida extraordinaria, llena de alegría, pasión y entusiasmo!  No te dejes llevar por tu pasado, tú puedes ser, hacer y tener todo lo que desees.  Deja de tratar de complacer a los demás o ser alguien más.  Es mejor ser la versión original de tí mismo(a), que un duplicado exacto de alguien más.  Deja de quejarte y no hacer nada.  Conócete a ti mismo(a).  Descubre lo que realmente quieres ser, hacer y tener.  No sigas al montón.  Vive en alineación con tu propósito.  Descubre tus valores, ellos son tu esencia.  Diseña tu vida ideal.  Deja de poner tu vida en espera.  Actúa.  Evalúa lo que estás haciendo actualmente y continúa haciéndolo sólo si tiene algún significado para tí.  No lo hagas sólo porque “todos lo hacen” o porque es lo que los demás esperan de tí.  Haz lo que te gusta hacer.  La vida es demasiado corta para desperdiciarla haciendo algo más.  Si algo no te gusta, no lo hagas.  Gasta tu tiempo y energía en cosas que te traigan alegría y satisfacción.  Descubre tu pasión en la vida.  ¿Que es lo que te enciende?  Si aún no lo sabes, haz tu primer objetivo el saberlo.  ¿Qué es lo que realmente te hace feliz?  ¿Cuál es tu propósito de vida?
Permanece abierto(a) a las críticas, pero no te dejes afectar por ellas.  Aprende de ellas.  Se positivo(a).  Cree en ti mismo(a) y en tus capacidades y talentos.   Deja ir las relaciones que no te sirven, la gente negativa, deshonesta, que no te respeta, que te hace sentir mal acerca de ti mismo(a) y que no te deja crecer.  Continúa aprendiendo siempre.  Siempre hay algo que aprender.  Aprende de tus errores y “fracasos”  Aprende cosas diferentes.  Sal de tu zona de comodidad, intenta hacer algo diferente a lo que normalmente haces.  Si vas a pasar tu tiempo haciendo algo, hazlo lo mejor que puedas.
No te conformes con menos que una vida extraordinaria.  No te conformes con un trabajo que no te gusta.  No te conformes con una relación que no te satisface.  No te conformes con amigos que te hacen sentir menos.  Ve por aquello que realmente quieres.  Abrete a nuevas ideas. No te limites.  Piensa siempre en posibilidades, no en limitaciones.  Y por favor, ¡no vivas tu vida en piloto automático!
Olvidamos quienes somos en verdad.  Y olvidamos también que todo es posible.  Todo lo que hemos soñado y querido es posible.  Solo es cuestión de tomar los pasos adecuados para lograrlo, y lo primero que tienes que hacer es definir qué es lo que quieres.  Para vivir tu mejor vida, primero tienes que identificar tus más grandes deseos, metas y sueños, cosas que te emocionan, que te hacen sentir vivo(a).
Por otra parte, además de la influencia de otras personas, es importante hacernos conscientes de que nuestras mentes están siendo bombardeadas diariamente con misiles de “información gratuita” a través de los medios electrónicos y escritos.  A menudo sin saberlo, estamos haciendo lo que otros quieren que hagamos.  Fíjate en la ropa que estás usando, en lo que comes, en los lugares que frecuentas, en las actividades que desarrollas, en lo que gastas tu dinero y tu tiempo y en cómo te comportas.  ¿Acaso no estás haciendo lo que otros te están diciendo? El seguir ciegamente a los demás, sin usar nuestra mente y nuestro sentido común, y sin considerar nuestros propios deseos, puede ser desastroso para nuestra vida.
Los seres humanos nos hemos convertido en meros robots en las manos de aquellos que tienen el control completo de nuestras vidas y nos están dirigiendo a través del control remoto de lo que llamamos “educación” e “información”.  Hemos perdido nuestra individualidad, nuestra creatividad.  Muy pocas personas son lo suficientemente fuertes para tomar el control de sus propias vidas, sin dejarse influenciar por otros, y son, sin lugar a dudas, las personas más poderosas en la Tierra.  Se necesita mucho valor, sabiduría y fuerza interior para vivir la vida en su totalidad, en su originalidad, y de una manera digna y ambiciosa.
¿Que harías si supieras que no puedes fracasar?  ¿Que harías si tuvieras recursos ilimitados?  ¡Cual es tu más grande sueño?  ¿Que quieres lograr en tu vida?  ¿Cuál sería tu vida ideal?  ¿Cuál sería una vida de la cual estarías orgulloso(a)?  ¿Cómo quieres vivir el resto de  tu propia vida?
“Tu tiempo es limitado, así que no lo desperdicies viviendo la vida de alguien más. No te quedes atrapado en el dogma, que es vivir con los resultados de la forma de pensar de otras personas. No dejes que el ruido de las opiniones de los demás, opaquen tu voz interior. Y lo más importante, ten el coraje de seguir a tu corazón y a tu intuición. Ellos saben, de alguna manera, en lo que en realidad deseas convertirte. Todo lo demás, es secundario.” Steve Jobs